lunes, 4 de noviembre de 2013

Rima 66

Sueños de alquitrán
que suben sin parar,
por culpa del afán.

Sueñas con el mar,
lejos como está,
melancolías sin par.

Deseo de los sueños
que mueren cuando viven
y viven de morir.

Desnaturalizada está
en estos días, la proteína,
de la felicidad.

sábado, 26 de octubre de 2013

Sueños muertos.

Mueren sueños al llorar,
mueren sueños en la copa
de algún viejo bar.

Mueren sueños sin ropa
a la orilla del mar,
a la sombra del nogal.

Mueren los sueños que me arropan
junto a tus senos en el hogar.

Mueren mis sueños en tu boca,
sobretodo si te vas.

lunes, 7 de octubre de 2013

Vientos

Nubes de polvo estrellado
en la constelación de tus manos.
Formas difusas
que el viento arrastra
con calma,
pero no pausado.
Sueños que vuelven eterna
tu cálida sonrisa.
Vientos que fugatizan
tus lágrimas etéreas.
Crisantemos que viven en muerte
y mueren al reír.
Sueños que dicen "no quiero"
hasta que llegan a ti.

martes, 11 de junio de 2013

Rima 65

Un remolino
de sueños que se apagan
con la última calada.

Que nieva en primavera
los sueños que se queman
con tu almohada.

El fuego en tus entrañas
quema si lo mezclo
con whisky 12 años.

Las nubes que gorjeas,
crean sueños de alcoba
si los mezclo con caricias.

Son sueños de la luna,
suspiros de la tuna
y besos con fortuna.

Y fumar, la pipa de la paz,
en nombre del señor.
Y fumar, la pipa de la paz,
en nombre de Dios.

lunes, 20 de mayo de 2013

Rima 64

Sueña con el sueño
de aquel sueño que has soñado
en el sueño del lugar,
del lugar de que nunca querrías marchar.

Si la vida es ese sueño
no la dudes en vivir,
pues, es un sueño bien real.

Si la muerte es ese sueño
no la dudes en cambiar,
pues, no mereces ese mal.

Sueña con el sueño
del mundo que siempre has deseado
que sea tu hogar.
¡Hogar que no desees abandonar!

jueves, 16 de mayo de 2013

Otra rima.

Pues como lo prometido es deuda, e aquí uno de mis últimos poemas escritos a estilográfica, con mi última adquisición, esta Pelikan M100 que me llegó esta mañana y tinta violeta Pelikan.

viernes, 3 de mayo de 2013

Rima

Con el tiempo de antemano
he de decir que le quiero,
que le quiero en mi alcoba
donde no queda consuelo.
Una alcoba de suspiros
una alcoba de miedo,
donde el corazón ansía
aquel sueño perecedero.

miércoles, 17 de abril de 2013

Monografía.

Si me preguntas qué es la madurez, y nos encontramos en un ámbito científico te diré, que un estado de madurez es aquel en que se ha alcanzado el máximo desarrollo físico de un ente.
Sin embargo, si nos encontramos alrededor de una mesa, en cómodos sillones postrados, fumando una pipa y bebiendo buen whisky mientras de fondo la novena de Beethoven escuchamos, la cosa ya cambia en una conversación de carácter psicológico o filosófico.
Y, me dirás, "madurar es preocuparse de las cosas importantes de la vida con absoluta seriedad, no perder la compostura y pensar friamente en el futuro", a ello te respodería, "¿qué son las cosas supuestamente importantes de la vida si el futuro de todo ser humano es la muerte?" Yo, soy capaz de definir las "cosas importantes de la vida" en una sola palabra, "felicidad".
Madurar es tener consciencia de tus actos, de sus posibles repercusiones, saber sus soluciones, motivos, etcétera. Madurar, no es no cometer errores, sino conocer tus errores, madurar es tratar de disfrutar esta vida efímera, no enclaustrar tus sentimientos, madurar es ahogarte en lágrimas para desahogarte y poder reírte de ellas, madurar no es no ser imbécil, madurar es ser tú mismo, y que ser tú mismo te haga feliz.

sábado, 30 de marzo de 2013

Rima olvidada

La oscuridad me torna,
se cierne en cruel hora
y quiere que diga
que en mi corazón mora.
Pero no, ya no vive en él
saliste de mí, destino cruel
me has dado a probar la miel.
Y, destino, ahora no la voy a perder
no diré que una vez le ame.
¡Puedo! Y lo sé, destino, venceré.
Porque eres gloria,
porque siempre me enamoras,
y, ¿qué quieres que diga?
mi amor, no te abandona.

domingo, 24 de marzo de 2013

Poema narrativo.

La vida es el camino a la muerte, la vida es sentir pasar el sinsentido de los días con el hastío en el corazón. Esperar la muerte es el sentido del ser humano cuando está en posesión del vacío de la vida, de su forma inconclusa. No es en mí, símbolo de desesperanza orar a un dios tan mortal como el que más por la premura de la muerte, no es desesperanza si no es en soledad, como ya no es soledad esperar, no me sabe tan mal, vosotros, hermanos míos, comprendéis mi dilema, pues tanto morir como vivir es un camino pedregoso, y a veces difícil de escoger.
Cuándo el sentir de la muerte sobre tu vello erizado pende una mota de felicidad puede apaciguar tu alma que reza, mátame, mátame ya, no esperes más. El problema en esta premisa es que cuándo no existe en tu vida ya la soledad de tu alma, cuándo la muerte pende del mismo modo es tu corazón que grita, déjame vivir, déjame vivir largo tiempo más, déjame disfrutar del amor, de la felicidad.

martes, 19 de febrero de 2013

Improvisación.

Esto que vas a leer se llama improvisar un poema a las 23:34 (hora de inicio) del 19 de Febrero.

La vida es este no saber que hacer.
Este ver pasar el tiempo.
Este esperar pacientemente la muerte.

La vida en un continuo hastío
que se lleva el viento
a buscar en mi camino.

Y el tiempo es su enemigo,
mi vida, odia al tiempo.
El tiempo no quiere estar conmigo
me dice que le miento.

Me dice que no quiero estar con él,
que no quiero su destino.
Pues fue fugaz como vino
y fugar como se muere.

viernes, 1 de febrero de 2013

Rima 59

Un corazón en pena
hiende el alma cuál estaca.
Muere tu corazón herido
agoniza sobre la arena.
Aquel ring donde luchaba
por aquel amor fugitivo.


No os podréis quejar de lo corto que ha sido el poema de hoy, mis queridísimos lectores.

jueves, 31 de enero de 2013

El rol de la muerte (V)

Vi nublada mi vista, empañada en roja sangre, vi, el color negro de mi vida, vi mi cuerpo desnaturalizado por la muerte y como un hacha pesada en este cruel mundo, desperté.
Pero a mi despertar ya nada era igual, el mundo en que mi vida vi consumir se había extinguido y nada de él se mantuvo...
Me encontraba ahora en una sala amueblada de máquinas e instrumentación, un par de hombres había a mi alrededor, el primero de ellos se encontraba tranquilamente sentado en una silla, observándome, levantose excitado a mi despertar, el otro, en un ordenador estudiando complejos gráficos... y yo... yo estaba inmovilizada en un extraño aparato, en el cuál no podía hablar, moverme o tan sólo sentir.
 -¡Eh! ¡Despertó al fin! - Chilló el hombre que me observaba.
 -¿No me digas? - Respondió el otro irónicamente. -Lo dices como si fuera algo casual. -
 -Eres idiota, lo lógico sería que hubiera fenecido con esto, pero no, aquí está, viva y consciente, capaz de contar al mundo sus vivencias... ¡Vamos! ¡Cuéntaselo todo! -
 -Bien... Chiquilla, estos gráficos que ves en mi pantalla son tus constantes neuronales, y el aparato en que te encuentras es lo que llamamos un "Neuroestimulador". Has sido, pues, conejillo de indias de un cruel e innovador experimento, ya que todas las vivencias acaecidas en tu mente fueron reales en ella, pese a que en la vida real no sean consideradas más que un sueño, el hecho es que fueron creadas en tu mente a partir de este ordenador y programadas por mi mano en el teclado del mismo. Y ahora, pequeña, cuéntanoslo todo. 




Y ahora os dejo un enlace para que podáis leer el relato entero y sin problemas, siento los retrasos de publicación etcétera, el poco tiempo fue más duro que la pereza para con esta labor.
https://www.dropbox.com/s/0difcgagbo1nomr/Desenga%C3%B1o%20mental.pdf

martes, 29 de enero de 2013

Rima 43

Digo hola,
quizás,
tal vez...
Digo te quiero,
digo un abrazo,
una promesa,
una palabra de amor...
un consuelo.

Digo, con toda razón,
que tuyo es mi corazón...

Con un suspiro.

sábado, 26 de enero de 2013

Rima 25

Aunque te hayas cansado,
no te rindas al dolor,
lucha, camarada, sin dudarlo,
haz la guerra y gánala, por amor.

Vence, gana y no lo dudes,
sueña y vive llenamente,
sal y sigue, no murmures,
esto, aquello... ¡Usa la mente!

¡Sé cómo he de vivir!
No voy a cortar mi aorta,
de hecho, que sepas, que soy feliz.

martes, 15 de enero de 2013

El rol de la muerte (IV)

Me encontraba en la linde de un frondoso bosque, mirando a la espesura. Tan sólo veía un par de líneas de troncos de pino y oscuridad... una terrible oscuridad, al girarme, me encontré frente a un puente colgante sobre un gran precipicio, cuerdas gastadas, tablones putrefactos, o rotos, eran los componentes del camino hacia adelante. Pese al vértigo que sentía avancé agilmente por él, de tablón en tablón, hasta que, a mitad del puente, un espacio hueco de tres o cuatro tablones rotos me impedía avanzar normalmente, sin embargo, saltar me infundía autentico pavor. Fue entonces cuándo me detuve por vez primera y miré abajo... el fondo del precipicio era un río de aguas bravas de un extraño color rojizo, diríase que parecía un  río de sangre... armándome de valor salté el trecho que separaba el continuar con mi camino, y vaya si lo salté, pero el siguiente tablón cedió bajo mi peso. Conseguí quedarme colgada de una cuerda del puente, pero, inexplicablemente, mi brazo fue seccionado limpiamente a la altura del hombro, y comenzó a sangrar bestialmente mientras mi cuerpo caía sin parar hacia ese río rojo como la sangre. Cuándo estaba cerca del agua roja perdí el conocimiento por el desangramiento, y fue en ese preciso instante cuándo desperté, de nuevo en esa horrible y oscura sala de nadie.
Al despertar, caminé durante un buen rato sin rumbo por la siniestra oscuridad, no topé con nada, y por ello, volvíme a sentar, tras un buen rato caí de nuevo dormida...
Me encontraba en la misma sala oscura, pero, bajo mis pies, sentía un ligero chapoteo, un fluido, desconocido para mí, se encontraba bajo ellos, pero poco a poco subí el nivel de dicho fluido, hasta que en lugar de andar, me vi obligada a comenzar a nadar para no ahogarme. Nadaba en completa oscuridad, y esto fue así por horas, tal fue el tiempo que pasé de este modo que acabé pensando en dejarlo todo y dejarme morir, antes de poder llevarlo a cabo se iluminó tenuemente la sala, todo rojo, todo sangre, desistí, de dejé caer, me dejé ahogar, pero no pude, contra mi voluntad, ascendió bajo mí una pequeña barquita diseñada con miembros seccionados, piernas y brazos entrelazados. Mi furia por no haber logrado mi propósito de suicidarme era bestial, de hecho, era tal que sin siquiera haberme dado cuenta de qué hacía había llevado la hoja de un agudo puñal, que se encontraba en mi mano, a la parte central de mi garganta por un lateral, justo detrás de la tráquea, y dónde la aorta habita, así, con un súbito movimiento hendí mi pescuezo, atravesándolo de punta a punta, y de un brusco tirón sesgué por entero mi tráquea.